20090919

Una anciana de 88 años creyéndose morir

Una anciana de 88 años creyéndose morir, llama a su esposo de 90 años al dormitorio y le expresa:


- "Viejo, viejo, me estoy muriendo"


El anciano le responde cariñosamente:


- "No seas bobita mi amor" Es un mal pasajero, no le des importancia.


- "No, esta vez es serio. Y no quiero irme sin entregarte "algo" dice la anciana.
- "Por favor, abre el ropero y saca una caja de madera que está oculta debajo de la ropa de verano.


El esposo cumple con lo indicado y localiza la caja.


- "Ábrela" pide su esposa con un hilo de voz.


El anciano así lo hace y encuentra dentro de la caja tres huevos y U$S 100.000.-
Entre alborozado y extrañado pregunta:
- "Mi amor, que son estos tres huevos"?


La anciana responde:
- "No quiero irme sin contarte un secreto"... cada huevo representa las veces que quedé insatisfecha en nuestras relaciones sexuales".


El anciano comenta entre canchero, satisfecho y orgulloso:
- ¡Que bueno! ¡Solo tres veces en casi 60 años de matrimonio!
Y enseguida pregunta:
- "¿Y estos U$S 100.000?"


La anciana toma dulcemente la mano de su esposo y con un suspiro confiesa:
- "Cada vez que juntaba una docena de huevos los vendía..."